viernes, 8 de agosto de 2014

Ricotta vegana

El tofu, ese bloque blanco y algo insípido que nos desafía desde la nevera... Al principio no sabía muy bien cómo cocinarlo, no me quedaba muy bien o no tanto como yo quería, pero siempre volvía a comprarlo... Hasta que un día hice ricotta vegana!! Desde entonces es mi forma favorita de consumir tofu, y además es muy sencilla su preparación.


Las propiedades del tofu son muchas, entre ellas tenemos: aporte de calcio, proteínas y aminoácidos esenciales, regula los estrógenos al ser rico en isoflavonas, regula los niveles de colesterol, contiene lecitina que es buena para la memoria, y es suave y digestivo.

1 pieza de tofu (suelen venderse en porciones de 400 gr).
2 cucharadas de aceite de oliva.
2 cucharadas de zumo de limón.
1/2 cucharada de levadura de cerveza desamargada en copos o escamas.
1 cucharadita de sal.

Sacamos el tofu de su envase, lo enjuagamos con agua y secamos bien con papel de cocina.
Presionamos con las manos si vemos que suelta mucho líquido para intentar dejarlo lo más seco posible.

En un recipiente o plato amplio, colocamos la pieza de tofu y la aplastaremos con un pisapuré o tenedor.

Cuando esté todo desmigado le agregaremos el aceite, el zumo de limón, la levadura de cerveza y la sal. Lo mezclamos bien, tapamos el recipiente y lo metemos en la nevera unos 25-30 minutos para que se vayan mezclando los sabores.



Lo uso en muchas recetas, con pasta sobre todo, pero también para rellenar unos pimientos del piquillo, en ensalada, sobre una tosta con tomate y pesto... para rellenar una pasta fresca, lo que se te ocurra!!

Aquí lo ves en unos rollitos de pasta filo, con champiñones al ajillo y espinacas.


Ya sabes, échale un poco de imaginación y disfruta de la ricotta vegana!



Cocinando un mundo mejor,

Julia.

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